El pasado dieciocho de diciembre se inauguró en el centro comercial Hikarie en Tokio la BLEACH EX., primera exposición de genga (dibujos originales) del manga shônen homónimo escrito e ilustrado por Kubo Tite. Esta exposición es una de las actividades principales dentro del proyecto que celebra el vigésimo aniversario de la obra, entre las que también se encuentran la producción de una nueva serie de anime para otoño de este año que comienza. Debido a la temática de la exposición, avisamos a los lectores que la presente crítica contiene spoilers del manga Bleach.
Ante todo, la exposición es un fiel reflejo del manga que conmemora: está estructurada de manera sencilla, donde el énfasis está en la presentación y en el componente estético, de manera similar al propio manga de Bleach. Empezando por la narrativa de la exposición, está dividida en las tres sagas principales que componen la serie: la incursión en Soul Society y el encuentro con los Shinigami; la infiltración en Hueco Mundo y la lucha con los Arrancar, que también incluye la aparición de los Vizard y la pelea contra Aizen Sôsuke, y la saga final contra el grupo de los Wandenreich, compuesto por los Quincy; la exposición se cierra con un apartado dedicado a las ilustraciones hechas por Kubo a lo largo de la publicación de la serie, tales como portadas de revista, calendarios o encuestas de popularidad. A lo largo de la exposición se presentan los genga de las escenas clave de cada saga, acompañados la mayor parte de ellos por comentarios del autor, referenciando sobre todo las dificultades que tenía al componer una determinada escena, experimentos estéticos, o detalles que podrían pasar desapercibidos al lector. Tenemos que concretar que todos los textos de la exposición están escritos exclusivamente en japonés, algo habitual en las exposiciones temporales organizadas dentro del país nipón.
Sin duda, el punto fuerte de esta muestra es su presentación. A diferencia de otras exposiciones,1 estaban prohibidas las fotografías en todo el recinto, por lo que haremos lo posible por transmitir en esta crítica el trabajo que le han dedicado a este aspecto. Nada más entrar, los visitantes son recibidos en un pasillo con la pared frontal decorada con algunas viñetas de los protagonistas de la serie (Ichigo, Orihime, Rukia, Urahara…) acompañados de sus frases clave. Tras una breve espera, uno de los encargados abre una cortina separadora y nos hace pasar al recinto principal. El impacto visual que causa ver esta entrada es difícil de describir. Se trata de un amplísimo hall, con los muros decorados en su totalidad por imágenes a tamaño real de todo el reparto de Bleach (Shinigami, Arrancar, Vizard y Quincy) dibujados expresamente para la ocasión por Kubo Tite; del techo cuelgan enormes cartones estampados con las imágenes de todos los Capitanes y Vice-Capitanes de los Trece Escuadrones de Soul Society, cada uno con una pose característica y con el nombre y su afiliación pintada en caligrafía de fondo; el centro de la sala está dominado por una gran pantalla donde se reproduce un vídeo tributo a la serie, distinto de los dos vídeos promocionales que se han compartido en la website oficial de la exposición. Tras su reproducción, se deja al visitante que se mueva libremente por las salas, e incluso se insiste en que no hace falta seguir un orden determinado para evitar aglomeraciones, una costumbre que normalmente no está bien vista en los museos japoneses.
Manteniendo uniformidad con los genga, y con la propia serie, los dos colores principales de la exposición son el negro y el blanco, que se van alternando para diferenciar las distintas partes comentadas anteriormente. La excepción es la parte final dedicada a las ilustraciones, en las que se han añadido toques de color (verdes, naranjas, morados…), así como un vídeo que muestra el proceso creativo del autor. En general, las paredes se encuentran pintadas con colores planos, sin añadidos, exceptuando el panel explicativo al comienzo de cada “saga” que incluye comentarios de los personajes principales cada una. Otros detalles destacables son los paneles colgantes dedicados a los Arrancar en la parte de Hueco Mundo, del mismo estilo que los ilustrados con los Trece Escuadrones de Shinigami, así como la parte de los Quincy donde, aunque los muros están pintados de negro, incluyen imágenes pintadas en blanco a gran escala de escenas importante de los genga seleccionados. Dentro de la organización, sin embargo, queremos llamar la atención sobre una sala incluida en la parte de Hueco Mundo que está dedicada a las muertes principales que suceden en la serie: Ichimaru Gin, Nnoitra Gilga, Ulquiorra Cifer, Unohana Retsu, Bazzard Black y Nemu Kurotsuchi. El pasillo está presidido por una imagen a gran escala del mausoleo de Ukitake Jyûshirô, con las características Mariposas del Infierno de la serie colgando del techo. Para cada una de las muertes se ha seguido el mismo patrón: en una pequeña balda semicircular están colocados acrílicos uno detrás de otro que reproducen en alta calidad cada una de las páginas del capítulo donde muere el personaje, incluyendo el genga únicamente de la escena climática en el centro de la composición.
Podemos concluir, por tanto, que BLEACH EX. es un magnífico tributo a una de las series shônen que ayudaron a definir el género.