Se llama seichi junrei (cuya traducción literal sería “peregrinaje santo”) al fenómeno de visitar lugares del mundo real que aparecen en series de anime, manga, videojuegos u otras formas de expresión otaku.[1] El más extendido es el relacionado con el anime, al que se le conoce como anime seichi junrei, que se ha traducido al español como peregrinaje otaku.
El peregrinaje otaku es un fenómeno creado por lo que se llaman otakus de tercera generación. Este término se refiere a personas (principalmente japonesas) que nacieron alrededor de 1980 y que vivieron el enorme éxito e influencia del anime Neon Genesis Evangelion en 1997. La principal característica de esta generación de otakus es que crecieron con Internet como parte de sus vidas, lo que les llevó a estar acostumbrados a reunir y transmitir información rápidamente.
Los primeros ejemplos de peregrinaje otaku se pueden encontrar en los años noventa, ya que hay constancia de gente que viajaba a otras prefecturas con el único objetivo de ver el lugar real que había inspirado alguna serie que había visto. Sin embargo, este comportamiento era algo aislado.
El concepto de peregrinaje otaku como tal nació en el año 2002, cuando el gobierno japonés lanzó la campaña de turismo Cool Japan (imitación del Cool Britannia de los años noventa inspirado en la cultura popular de los años sesenta) en la que se consideraba la cultura popular como un potencial recurso turístico. Se esperaba que de esta manera se solucionaran los problemas de despoblación y estancamiento económico de Japón en esos años. El término de peregrinaje otaku empezó a usarse de manera generalizada en los medios de comunicación a partir del año 2008.
Durante el año 2000 y siguientes, se hicieron varios informes donde se instaba a las autoridades locales a incluir lugares relacionados con la cultura popular dentro de sus planes de desarrollo. Estas propuestas fueron realizadas de manera conjunta por el Ministerio de Territorio, Infraestructura, Transporte y Turismo, por el Ministerio de Economía, Comercio e Industria y por una oficina dentro del Ministerio de Educación, Cultura, Deporte, Ciencia y Tecnología llamada Oficina de Asuntos Culturales (creada en 1968 para promocionar el arte y la cultura japoneses). Fue también el gobierno central el que empezó las primeras publicaciones de folletos relacionados con el tema, siendo el primero Japan anime tourism guide. Sin embargo, con el tiempo, la mayor parte de las decisiones relacionadas con el peregrinaje otaku se han ido delegando a los gobiernos propios de las prefecturas, sin que tenga una influencia tan directa el gobierno central.
Una de las iniciativas relacionadas con el peregrinaje otaku más recientes y de mayor escala ha sido la desarrollada por la editorial japonesa de mangas Kadokawa, llamada “Visita los 88 lugares sagrados del anime”. Esta propuesta, cuyo nombre hace referencia al Peregrinaje de los 88 Templos en Shikoku, se inició a mediados de 2016, cuando Kadokawa habilitó una página web donde cualquier persona del mundo podía votar hasta cinco lugares de peregrinaje otaku que le gustaría visitar. Esta votación estuvo disponible durante un año, y el pasado 26 de agosto de 2017 se seleccionaron los ochenta y ocho lugares más votados, que se pueden consultar en una página web[2] especialmente habilitada para ello (aunque, actualmente, sólo está en japonés).
El objetivo del peregrinaje otaku es visitar las localizaciones del mundo real en los que los animes se han inspirado. Los lugares en cuestión pueden ser tanto de interés cultural y turístico general (edificios emblemáticos, monumentos) como cotidianos (estaciones de tren, parques, cruces) que no tienen ningún interés salvo para el conocedor del anime en cuestión.
En cuanto a dónde toma lugar, lo más extendido es hacer este tipo de turismo dentro de Japón, ya que muchos animes se desarrollan en territorio japonés o están inspirados en sus paisajes. Sin embargo, no es exclusivo de este territorio.
Centrándonos en el territorio japonés, los puntos de interés para el peregrinaje otaku no están distribuidos de manera uniforme por todo el archipiélago. Estadísticas publicadas por el gobierno japonés en 2014 indican que, mientras las zonas de Tokio y Kioto están abarrotadas de lugares de interés para la comunidad otaku, los extremos Norte y Sur del archipiélago, y especialmente la isla de Shikoku, están infrarrepresentados.
Se pueden distinguir dos tipos principales de peregrinaje otaku:
Apoyado por el gobierno: las autoridades locales de cada prefectura hacen un esfuerzo por facilitar el peregrinaje otaku en su territorio y aumentar el turismo: hay panfletos oficiales donde se relacionan los sitios del anime con los lugares reales, se vende una abundante cantidad de merchandising y suele haber otros tipos de promoción publicitaria (carteles en las estaciones, modelos de cartón de los personajes o decoraciones en los trenes).
Este tipo de peregrinaje otaku suele ser temporal, es decir, sólo es promocionado por las prefecturas durante un periodo limitado de tiempo como parte de la campaña promocional asociada al estreno o la re-edición del anime.
De fans para fans: en este caso, un otaku reúne información sobre qué sitios de un anime se corresponden con sitios reales y elabora un mapa donde los apunta. Esta información es luego compartida a través de la red. La página web en la que está mayormente centralizada toda esta información es Anime Tourism[3] que, al igual que mucha información relativa al peregrinaje otaku, está sólo en japonés. En ella se listan todas las prefecturas de Japón y los animes relacionados con ellas, así como los mapas (realizados con GoogleMaps) donde los fans han marcado los puntos de interés.
Por supuesto, Anime Tourism no es la única fuente de información sobre este tipo de peregrinaje otaku: un gran número de particulares habla de sus viajes a los lugares que aparecen en animes y comparten sus experiencias en sus blogs personales o en las redes sociales (principalmente Twitter). Si bien la información recogida de esta manera está muy dispersa, tiene la ventaja sobre Anime Tourism de que suele estar en más idiomas aparte del japonés, lo que facilita el intercambio de información fuera del archipiélago nipón.
En la mayoría de estos casos, las autoridades locales de la zona no han hecho ningún esfuerzo adicional por apoyar el peregrinaje otaku.
Como cualquier otro tipo de viaje, el peregrinaje otaku puede hacerse en solitario, con amigos o en grupos guiados (si bien esta última opción sólo está presente en el tipo de peregrinaje otaku apoyado por el gobierno cuando organizan visitas guiadas de algún tipo), si bien investigando el tema se puede ver que la mayor parte de este tipo de viajes se hacen en solitario.
Hay que concretar que ambos tipos de peregrinaje otaku no son excluyentes. Uno de los ejemplos más recientes es el turismo relacionado con el éxito mundial Your Name.[4] Al poco del estreno de la película empezaron a aparecer en la red comparativas hechas por fans entre imágenes de la película y los lugares reales en las que estaban inspiradas, y se tiene constancia de gran número de particulares desplazándose a dichas zonas. El gobierno japonés fue algo más lento, pero al ver el potencial de la película ha ido implementando diversas medidas para aprovecharlo, como por ejemplo, un autobús que lleva a sus ocupantes por las partes de la prefectura de Gifu en la que está inspirada gran parte de la película.
En conclusión, el peregrinaje otaku es un fenómeno de actualidad en constante expansión, ya que crece y evoluciona con cada nueva serie de anime que se crea. En artículos posteriores realizaremos nuestro propio recorrido por Japón a través de algunas de estas rutas de peregrinaje otaku.
Notas:
[1] La palabra otaku es un término de origen japonés con connotaciones peyorativas referido a gente con aficiones apasionadas, sobre todo relacionadas con el manga y el anime.
[2] https://animetourism88.com/ja
[4] Shinkai, Makoto. Kimi no Na wa. Estudio CoMix Wave Films, 2016 (traída a España por Selecta Visión, 2017)