Durante la presente temporada de anime, podemos encontrar toda una serie de interesantes propuestas de muy diversa temática, no obstante, en el presente artículo queremos centrarnos en un caso concreto como es Kageki Shoujo!!, que nos permite, como veremos más adelante, introducirnos en la compañía teatral Takarazuka Revue.
En primer lugar, y centrándonos en la obra que nos ocupa, decir que se trata de una adaptación del manga homónimo de Kumiko Saiki, publicado por primera vez en el año 2012 para recopilarse en dos volúmenes. Posteriormente, y llegando hasta la actualidad, cuenta con una secuela a partir de 2015. Esta adaptación animada se está llevando a cabo por el estudio Pine Jam (al que podemos atribuir otros títulos, como Gleipnir, manga que actualmente edita en España Ivrea) y que cuenta, hasta el momento, con diez episodios. En cuanto al argumento, la historia se centra en un grupo de chicas que están formándose para ser parte de la compañía teatral Kouka, una agrupación únicamente femenina que lleva a cabo espectáculos teatrales y musicales de gran prestigio y que no deja de estar basada en Takarazuka, como iremos comentando más adelante. La historia toma como a una de las protagonistas a Sarasa, una chica que llama la atención por su altura, que ha dejado su pueblo natal y su familia (vinculada con el mundo del teatro kabuki) para cumplir su mayor aspiración: interpretar a Oscar sobre los escenarios, personaje protagonista de La Rosa de Versalles. Igualmente, podemos enumerar otros tantos personajes que llaman la atención, tanto por sus circunstancias como por los problemas que se irán encontrando a lo largo de la trama; este es el caso de Ai, una ex idol que se vio obligada a dejar su compañía por su actitud ante uno de sus fans, que se sobrepasó durante un fanmeeting. Ai se refugia en Kouka al tratarse de una escuela y compañía enteramente femeninas, lo que le permite sobrellevar su androfobia y prosperar en su desarrollo personal. No obstante, estas son únicamente unas breves pinceladas sobre las protagonistas, vamos a encontrar otros ejemplos que nos hablan de la presión familiar al formar parte de una tradición de actrices, la tensión en la escuela que puede llevar al desarrollo de trastornos de la alimentación y otros tantos temas que no vamos a desvelar por el momento.
Ahora sí, a la hora de hablar de Takarazuka Revue hemos de remontarnos al año 1914, aproximadamente, y destacar la figura de Kobayashi Ichizo, fundador del teatro y un importante contribuyente al desarrollo y crecimiento de la compañía de ferrocarriles Hankyu. En un primer momento, su objetivo era construir un hotel-balneario en la zona, pero debido a una serie de prohibiciones no pudo ser posible, así que decidió reconvertirlo en un teatro y en 1914 este acogió su primera representación. El objetivo de Kobayashi se corresponde bastante bien con el lema de la compañía “Modestia, encanto y gracia”, características propias de las actrices de Takarazuka que han de formarse en muy diversas artes, como la danza, el canto y la actuación, para poder pisar los escenarios. Takarazuka Revue sigue en activo a día de hoy, representando espectáculos de todo tipo que combinan, en primer lugar, un musical (ya sea basado en grandes musicales occidentales, leyendas orientales, obras de manga o interpretaciones de biografías de distintas estrellas) y después un espectáculo de revista con canciones y complejas coreografías. Cuenta con distintas troupes, cada una con sus actrices principales y especializaciones pero, eso sí, manteniendo siempre los mismos ideales de Kobayashi y siendo únicamente mujeres.
Como ya hemos comentado, en el anime se nos muestra una versión de Takarazuka bajo el nombre de Kouka, y, mediante el presente artículo queremos poner de relieve sus similitudes. En primer lugar, en ambos casos se destaca su prestigio y lo difícil que resulta acceder a su formación, de modo que son muy pocas las alumnas admitidas cada año, algo que también ocurre en la escuela ligada a Takarazuka Revue. En un primer momento, se consideraba como un centro de instrucción para señoritas donde, además de instruirlas para ser buenas amas de casa y esposas, se les enseñaba a actuar. Como podemos ver, esto ha cambiado bastante hasta llegar a la actualidad, donde la formación se ha especializado hasta centrarse en el mundo de las artes escénicas.
El aprendizaje y división de las actrices sigue un esquema similar, así como el importante respeto que sienten por sus compañeras mayores o incluso por las actrices de la compañía. En distintas escenas del anime, podemos acompañar a sus personajes en clases de canto, baile clásico o incluso claqué, además de Historia y otras materias mucho más comunes. Es común que se muestre a las chicas discutiendo sobre sus aspiraciones en el escenario, y es aquí cuando se introducen los términos otoko yaku y musume yaku. En el caso de las primeras, se trata de aquellas que interpretan los roles masculinos, destacando por encima una “top star” a la que se le conceden los papeles protagonistas. Las musume yaku son las responsables de los papeles femeninos, y, al igual que ocurre en el caso anterior, siempre hay una actriz que destaca por encima de las demás. No deja de resultar curioso que, a pesar de la existencia de una actriz top en ambas categorías, la otoko yaku siempre está por encima en cuanto a su valoración y admiración, quizás por sus habilidades a la hora de interpretar papeles masculinos. En su formación, mientras que las musume yaku son actrices hiper feminizadas en su apariencia y en sus gestos, a las otoko yaku se les pone bastante énfasis en la modulación de la voz, que ha de tener un tono más grave y fuerte, y en el tratamiento de los gestos que se consideran masculinos. No obstante, a la hora de actuar, vamos a ver que en ambos casos se sirven del maquillaje para subrayar ciertas características y llevan atuendos bastante llamativos, sobre todo en los espectáculos de revista, repletos de brillos y plumas. Retomando el caso del anime, son más las chicas que quieren interpretar papeles masculinos y, por lo tanto, sobresalir, no obstante entre ellas hablan de elementos que no dejar de ser determinantes, como la altura o el tono de voz, por no hablar de sus habilidades.
Aunque nuestras protagonistas no han llegado a debutar, en el anime se habla de la concepción del escenario e incluso se llega a mostrar parte de un espectáculo donde se representa Romeo y Julieta (con los correspondientes comentarios acerca de la concepción de las actrices, destacando la superioridad de la otoko yaku). En el escenario, destaca una de las partes más cercanas al público, que es el llamado “puente de plata”. En la serie se habla de que únicamente las actrices más prestigiosas pueden atravesar esa zona, y es verdad que durante los espectáculos es un espacio que se reserva, sobre todo, en los momentos de revista, para que las actrices estén más cerca del público, siendo también un lugar especial durante bailes en línea, donde se presenta todo el elenco. Recibe ese nombre por el acabado más pulido y brillante, que con las luces parece del metal mencionado.
Ahora sí, centrándonos en las actuaciones y el reflejo de las obras, ya hemos dicho que las alumnas asisten a una representación de Romeo y Julieta. En algunas escenas, se puede ver la concepción de trajes y decorados, que no dejan de recordar a una representación clásica; no aparece ninguna canción, aunque en pocos minutos se consigue poner de relieve las diferencias entre las musume yaku y las otoko yaku. Estas mismas diferencias quedan bastante claras cuando las alumnas han de representar una escena de la misma obra durante una de las clases. A todos aquellos lectores que tengan interés al respecto, no podemos dejar de recomendarles el visualizar vídeos de la propia compañía, muchos de ellos disponibles en su propia página web. Parece que estemos hablando de obras clásicas y grandes producciones, pero, como ya hemos citado antes, podemos hablar de adaptaciones de obras de manga, como el caso de La Rosa de Versalles (representada por primera vez en la década de los 70 del siglo pasado), o City Hunter, un manga de Tsukasa Hôjô que está publicando en España la editorial Arechi.
A Kageki Shoujo!! todavía le queda bastante que mostrarnos, y lo mismo podemos decir de la compañía Takarazuka Revue; así, quedamos a la espera del desenlace de la serie, con la posibilidad de que algún día el manga pueda ser licenciado en España. Hasta entonces, realmente podemos decir que se trata de una de las propuestas más destacadas de la temporada.