Tsuta Suzuki es una de las mangaka más activas en el Japón actual, por lo que era necesario que alguna editorial española publicase alguna de sus obras. Esto ha ocurrido con Tomodomo, quien a finales del pasado 2019 decidió licenciar los mangas BL autoconclusivos Vecinos distantes y Merry Checker (secuela del anterior). Hoy, en Ecos de Asia reseñaremos el primero de ellos.
A diferencia de muchas otras obras que inundan actualmente el mercado del Boys’ Love, en Vecinos distantes nos encontramos con la historia entre dos antiguos amigos de la infancia que se reencuentran diez años más tarde en el mismo bloque de viviendas. En la adolescencia, Mitsuya estaba enamorado de Noboru, quien era el mejor amigo de su hermano mayor, Toshimitsu, por lo que se trataba de una relación prácticamente imposible. Aun así, de manera inesperada, un día Mitsuya besó a Noboru, lo que provocó la huida de este del pueblo. Es en este contexto donde, tras diez años sin verse, ambos se reencuentran siendo vecinos en el mismo rellano.
En el tiempo en el que estuvieron sin verse cambiaron, maduraron y se forjaron una vida como adultos. Pero hay una cosa que no ha cambiado: Noboru fue el primer amor de Mitsuya, y eso es algo que jamás pudo olvidar. A lo mejor este reencuentro casual es un modo de revivir lo que sentía por Noboru, aunque, claramente, ahora tendrá que ser menos impulsivo y esperar a conocer los sentimientos de su nuevo vecino.
Además de esta pareja principal, en la obra hay otros personajes interesantes, como Yanase, un compañero de trabajo de Mitsuya que se acaba convirtiendo en su mejor amigo y persona de confianza; y Shiomi, un superior de Mitsuya que, de hecho, es el protagonista de Merry Checker, manga que reseñaremos próximamente.
Junto a esta historia se encuentra un dibujo bastante limpio y trabajado, aunque de apariencia sencilla y angulosa, lo que acompaña perfectamente el argumento directo y ligero que se encuentra en las páginas de la obra. Es cierto que la historia es predecible, pero eso es algo habitual en la mayor parte de los mangas de estilo BL; la diferencia con respecto a otros es, además de tratar una trama adulta (ya que la mayoría de los mangas que se encuentran en las tiendas suelen tener a adolescentes como protagonistas), presenta una gran narración que mezcla el romance con la comedia de un modo especial.
Además, se trata de una edición de Tomodomo, lo cual es sinónimo de calidad. El manga autoconclusivo viene acompañado de un marcapáginas, como viene siendo habitual, y las dos primeras páginas a color (además de la sobrecubierta). Por último, la edición incluye una historia adicional, titulada Soñando sobre las aguas, además de unas palabras finales de la autora.
De este modo, Vecinos distantes ofrece una buena historia BL con un dibujo y estilo acorde a la misma, dando como resultado una obra agradable y fácil de leer que viene muy bien para distraerse del día a día. Gracias a Ediciones Tomodomo, todo aquel que lea la historieta podrá retrotraerse a su adolescencia y recordar, igual que hacen Mitsuya y Noboru, ese primer amor inolvidable.