Ecos de Asia vuelve de nuevo al universo de En la misma clase, manga de tres tomos dibujado y guionizado por Asumiko Nakamura. Esta obra, publicada originalmente entre los años 2008 y 2010, contaba la historia de amor entre los adolescentes Sajô y Kusakabe. Fue todo un éxito en Japón, motivo por el que la autora siguió explorando ese universo a lo largo de diferentes historias. Así, tenemos el autoconclusivo Sorano y Hara. Entre el cielo y el suelo, donde el protagonista es Hara, el antiguo profesor de Sajô y Kusakabe, y su extraño romance con Sorano; y los dos tomos de Antiguos alumnos, en los cuales continúan las historias de estos cuatro personajes, pero además se unen otros nuevos como Kinosaki o Miyamura, por mencionar algunos. Ahora todos estos personajes vuelven en Blanc, una serie de dos tomos publicada originalmente en 2020 y que ha llegado este 2022 a España de la mano de Ediciones Tomodomo, una de nuestras editoriales favoritas.
En esta obra, Asumiko Nakamura continúa las aventuras de Sajô y Kusakabe, quienes llevan manteniendo una relación a distancia desde que el primero decidió ir a estudiar a la Universidad de Kioto, mientras que el segundo se dedica a la composición musical, y a tocar con su banda en garitos, en la capital de Japón (también hace trabajillos a tiempo parcial). Esto provoca que no puedan verse muy de seguido, lo que ocasiona problemas en su relación, algo que ya se veía en Antiguos alumnos, pero que aquí se convierte en lo fundamental de la historia.
Algo muy importante a señalar es que todo el universo de En la misma clase es brutalmente realista. A diferencia de otros mangas de temática Boys’ Love que pueden tender más hacia la ficción y el artificio, Asumiko Nakamura ha creado unas historias reales y cercanas. En Blanc, Kusakabe y Sajô tienen veinte años y se están planteando su futuro, y en este hay dudas acerca de la viabilidad de la relación, pues ya llevan tres años como pareja a distancia. Es algo completamente lógico que, en esa edad, en la cual uno se plantea su vida y su futuro, se tengan dudas acerca de la persona a la que quieres y del futuro que puedes llegar a tener con ella. Además, no podemos olvidar que nos encontramos en Japón, un país que aún no encaja del todo bien al colectivo LGBTI+; la autora quiere reflejar la realidad de este hecho, pero sin regodearse ni en el drama ni en la tragedia, sino que prevalece el optimismo y la esperanza.
Importancia tienen en esta obra los personajes secundarios. Las amigas de Sajô, por su parte, así como el gran amigo de Kusakabe, son quienes los impulsan y los mueven en esta obra, señalando así la importancia de la verdadera amistad. Asimismo, la madre de Sajô es un gran nexo de unión para ellos.
Poco más se puede añadir acerca de esta obra sin desvelar demasiado la trama del manga. La gran pregunta es si verdaderamente Kusakabe y Sajô podrán estar juntos y tener el futuro que ansiaban cuando eran adolescentes. Blanc nos recuerda así lo que es crecer con nuestro amor del instituto y enfrentarse a la dura realidad de los adultos.
Todo ello, por supuesto, acompañado del especial y único dibujo de Asumiko Nakamura, con sus trazos manieristas, finos y alargados, los cuales han evolucionado muchísimo desde En la misma clase hasta ahora. La edición, como de costumbre, una maravilla, como viene siendo habitual en Tomodomo, incluyendo marcapáginas y postales. Blanc es una gran obra y una magnífica continuación de la historia de Sajô y Kusakabe, algo que los fanes del BL, sin duda, no se pueden perder.