Reseña: ‘Eso no estaba en mi libro de Japón’, de Beatriz Lizana (2021)

La editorial Almuzara cuenta entre sus novedades de febrero con el título Esto no estaba en mi libro de Japón, de Beatriz Lizana López, primera incursión del archipiélago nipón en un catálogo, por lo general, centrado en lo mediterráneo y en la cultura andaluza.

Esto no estaba en mi libro de Japón es un recorrido de la mano de su autora, acompañándola en un viaje de un mes a lo largo del País del Sol Naciente. No solamente recorremos junto a ella las calles niponas, sino que compartimos también el estímulo y la curiosidad hacia el otro, un camino de aprendizaje (un concepto tan japonés como el dô) que se ha materializado finalmente en forma de libro.

Estructurado en torno a catorce bloques temáticos,[1] aborda temas tan diversos como la cultura popular, la familia, la gastronomía o las relaciones interpersonales. Sin querer incurrir en un exhaustivo análisis academicista, se aproxima a distintos fenómenos, como la distribución urbanística en torno a las estaciones de metro en la capital, el papel de la mujer o las tasas de suicidios, ofreciendo respuestas generales que esbocen el marco mental para percibir e interpretar la diferencia.

Lo que presenta Beatriz Lizana, en resumen, es una familiarización con la realidad nipona actual para un público que la desconozca prácticamente por completo. Para un interesado con cierto bagaje, se quedará rápidamente corto, por tocar cuestiones en ocasiones excesivamente básicas. No obstante, en su voluntad de ofrecer una panorámica amplia sobre temas muy dispares, es difícil que no haya ninguna cuestión que pueda resultar ajena a cada lector.

El tono es muy distendido, salpicado de chascarrillos y de incisos, anécdotas y reflexiones que se mezclan con el trabajo de investigación y un desarrollo algo más estructurado en los apartados más informativos. El eje vertebrador no dejan de ser las vivencias de Lizana en Japón, que son las que le han dado pie a investigar algunas de las cuestiones. En este sentido, ante todo destaca la honestidad de su prólogo, en la que reconoce las limitaciones del texto y deja claro su valor como conjunto de reflexiones sobre la otredad nipona.

En este sentido, el título puede resultar algo capcioso, ya que integra un libro de viajes en una colección de curiosidades históricas. Los libros de Esto no estaba en mi libro de…, suelen aludir a momentos históricos concretos, como la Primera Guerra Mundial o el reino visigodo, o a ámbitos de conocimiento, como el cine o la filosofía, y al presentarse Japón como tema dentro de este paraguas puede dar una perspectiva equivocada de las pretensiones originales.

Notas:

[1] Japón en diez minutos, Japón desde el aire, Hablar y escribir japonés, Costumbres gastronómicas, Borracheras de infarto, La importancia del espacio cuando se viaja en solitario, La familia y la mujer, ¿Es difícil hacer amigos japoneses?, Tokio bajo tierra, Una extranjera en Japón, La infancia y la juventud japonesa, Así trabajan, Cultura pop y Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (+1), además de un extenso apartado bibliográfico.

Carolina Plou Anadón (272 Posts)

Historiadora del Arte, japonóloga, prepara una tesis doctoral sobre fotografía japonesa. Autora del libro “Bajo los cerezos en flor. 50 películas para conocer Japón”.