Trabajar en una librería de cómics en Japón: La librera calavera Honda-san

Una de las últimas licencias de Fandogamia ha sido La librera calavera Honda-san, una comedia autobiográfica de cuatro volúmenes en la que su autora, Honda, se presenta con una forma esquelética para contar sus vivencias en el día a día trabajando en una librería especializada en cómics en Japón.

Los anecdotarios de profesiones de cara al público son una constante dentro del humor costumbrista, porque al fin y al cabo se centran en una relación básica interpersonal en sociedad. Un desconocido se dirige a otro desconocido y se produce un intercambio social con el objetivo de llevar a cabo una transacción comercial. Siguiendo una mecánica tan sencilla, cada individuo aporta su propio bagaje y personalidad, dotando de entidad e identidad a cada encuentro.

Una de las claves de La librera calavera Honda-san es, precisamente, ese humor costumbrista basado en las experiencias personales de la autora trabajando en una tienda de cómics. Pese a lo específico del marco (acentuado por el carácter de nicho que adopta la publicación dentro del mercado español), la universalidad latente en la obra establece unos lazos de empatía con cualquier usuario habitual de librerías.

A ello se suma la cuestión específica: en España, si bien es cierto que últimamente parece existir una voluntad de abrirse a nuevos públicos, la lectura de manga sigue ciñéndose a un determinado nicho de mercado, al que apela directamente la obra original. Las referencias concretas a títulos específicos conservan su vigencia, y algunos de los clientes que visitan esta librería responden a estereotipos que el lector habituado al mundillo del manga podrá identificar con facilidad.

De hecho, en este sentido, Honda-san no era un personaje del todo desconocido para la comunidad de aficionados, ya que desde octubre de 2018 su versión anime estaba disponible en la plataforma Crunchyroll de manera prácticamente simultánea al estreno de los episodios en Japón. Esta producción audiovisual, cuya principal apuesta es una animación sencilla que realza un diseño de personajes muy cuidado y fiel al manga en episodios cortos de algo más de diez minutos de duración, ha logrado generar una cierta expectación adicional de cara a su publicación en España.

En cualquier caso, bajo esta capa de humor costumbrista, La librera calavera Honda-san alberga otras muchas virtudes por las que se convierte en un título muy recomendable. Cabría destacar, por ejemplo, la manera en la que se exponen algunas tareas propias de una librería, así como la idiosincrasia del mercado de cómic nipón. Así, ofrece una visión desde dentro de la cadena de distribución del libro, intermedia entre el cliente y las editoriales, una perspectiva fundamental que no suele tenerse en cuenta precisamente por ese carácter cotidiano.

Otro gran logro de Honda es su capacidad para transmitir una energía positiva que convierte la lectura en un ejercicio especialmente estimulante. Tanto Honda-san como sus compañeras no tienen rostro humano, sino que son alter egos que esconden sus rasgos reales tras máscaras, cascos, vendas y objetos. Sin embargo, esa barrera no las hace menos humanas. Cada una con sus peculiaridades, forman un equipo bien avenido que se esfuerza por sacar el trabajo adelante. Por otro lado, a la hora de representar a clientes, comerciales y otros personajes con los que interactúan en la librería, las anécdotas radiografían una parte del sistema, desde una perspectiva que alaba el entusiasmo. En todo momento prima la amabilidad y el respeto, sin caer en la broma fácil de la parodia o la burla.

Este primer tomo editado por Fandogamia incluye los siete primeros capítulos, así como unas historias cortas extra, realizadas con un estilo mucho más esbozado. El segundo tomo se espera para el mes de marzo, aunque afortunadamente nos queda el anime para matar el tiempo durante la espera.

Carolina Plou Anadón (272 Posts)

Historiadora del Arte, japonóloga, prepara una tesis doctoral sobre fotografía japonesa. Autora del libro “Bajo los cerezos en flor. 50 películas para conocer Japón”.