Reseña: “Mujeres de Ghibli” (2018), de Anna Junyent

Recientemente Diábolo Ediciones ha ampliado de manera sustancial su catálogo sobre libros referentes al anime y a la cultura otaku, aportando interesantes novedades al panorama divulgativo sobre este ámbito en España. El libro que reseñamos en esta ocasión sigue esta línea y aunque se trata de la ópera prima de una joven comunicadora audiovisual no tiene nada que envidiar a otros títulos de la editorial. Mujeres de Ghibli: La huella femenina de Miyazaki en el anime, firmado por Anna Junyent, realiza un recorrido por buena parte de los personajes femeninos de la filmografía del director y creador japonés, retratado como un potente feminista en la sombra (es decir, que no llega a definirse como tal), pionero en su tiempo y en su ambiente.

Portada de la obra reseñada

Tras un breve prólogo que firma Álvaro López Martín (autor, entre otras obras del libro Mi vecino Miyazaki), aparece el cuerpo del libro, en el que la autora analiza brevemente la presencia femenina en diez películas del afamado director japonés: Nausicä del Valle del Viento, El castillo en el cielo, Mi vecino Totoro, Nicky, la aprendiz de Bruja, Porco Rosso, La Princesa Mononoke, El viaje de Chihiro, El castillo ambulante, Ponyo en el acantilado y El viento se levanta.[1] Todos estos microcapítulos van acompañados de una impresionante parte gráfica, útil y necesaria para el desarrollo del discurso de Junnyent y que hará las delicias del público, especialmente de aquel que no conozca algunas de las películas analizadas.

Índice del libro.

Es evidente que la motivación de Junyent es de tipo personal, por haber las obras de Miyazaki marcado un punto de inflexión tanto en vida personal como en su todavía breve trayectoria académica. Con poco más que su apasionado discurso y unas valiosas imágenes ilustrativas, Anna Junyent consigue levantar un libro que difunde un noble mensaje, en que sin duda debería incidirse más a menudo.

Si bien el formato del libro es sencillo de comprender y lo bastante general para acercar la figura de Miyazaki al gran público, hay toda una serie de aspectos que podrían mejorarse de cara a próximas ediciones –ya que, por lo interesante del tema, no nos queda duda alguna de que las habrá-. En primer lugar, y a pesar de que se entiende que este libro está dirigido al público general, este deriva de la adaptación de un trabajo iniciático de investigación; considerando este punto, se echan en falta algunas notas al pie, ya no explicativas, sino que hagan referencia a las fuentes consultadas para el desarrollo de cada parte. Especialmente, porque Junyent proclama en este libro muchas ideas interesantes y, sin apenas citas, nunca llega a entenderse si estas son de su propia cosecha o si las ha tomado de algún otro autor, privando a los lectores de la posibilidad de profundizar en estos asuntos.[2]

Si bien se entiende que un exceso de notas podría entorpecer la lectura de un libro en el que la parte gráfica es tan sumamente importante, se echa en falta algún tipo de introducción o consideración de mayor profundidad sobre la historia de Japón y del anime, ya que, si bien existe una sección de carácter general, debemos tener en cuenta que la trayectoria de Miyazaki no solo se ha extendido durante las últimas décadas –en las que la situación de las mujeres, en Japón y en el mundo, ha variado considerablemente-, sino que sus películas se ambientan en periodos históricos muy diferentes. Si bien la redacción de este libro persigue otro objetivo, sorprende la normalización que la autora hace de este Miyazaki “feminista” (cuando este es, precisamente, uno de sus rasgos más distinguidos), pero la misma se lleva las manos a la cabeza cada vez que algún personaje, de películas ambientadas décadas o siglos atrás, desconfía de las capacidades de las mujeres. Seguramente, profundizar un poco más en el contexto histórico y la situación de las mujeres en cada una de las películas elegidas –además de compararlo con otros animes contemporáneos-, incluyendo fuentes y bibliografía de rigor, ayudaría a enriquecer esta prometedora “visión de género” de cara a futuros trabajos.

Estos aspectos hacen que resulte difícil de comprender cuál es el verdadero público objetivo de esta publicación: a un estudioso o fanático del anime, este ensayo le resultará insuficiente, ya que al no contar con referencias externas para completarlo, no profundizar en el tema; por otro lado, a aquel que acuda por interés sociológico o de estudios de género le sucederá lo mismo y, por último, al que no haya visto las películas de Miyazaki se las destripará (así que recomendamos un visionado general de las mismas antes de enfrascarse en la lectura del libro. No obstante, el trabajo realizado es destacable por su novedoso enfoque, y no dudamos de que, motivada por la misma pasión y arrojo que Miyazaki siente por determinados temas, Anna Junyent siga avanzado a pasos agigantados en el mundo de la divulgación de los temas tratados por el gran Hayao Miyazaki; confiamos en que este ensayo sea meramente un punto de partida para profundizar en futuras investigaciones más concienzudas.

Notas:

[1] A pesar del título del libro, como bien se indica en la introducción, la autora se ciñe a películas dirigidas por Hayao Miyazaki y obvia las realizadas por Isao Takahata y otros autores, seguramente con una casuística muy diversa.

[2] Estas referencias se limitan únicamente limitándose prácticamente a algún que otro estudio sobre Ghibli o de carácter muy general sobre las mujeres japonesas.

Marisa Peiró Márquez (145 Posts)

Marisa Peiró Márquez (marisapeiro@ecosdeasia.com) es Doctora en Historia del Arte por la Universidad de Zaragoza. En esta misma universidad se licenció en Historia del Arte y realizó el Máster en Estudios Avanzados de Historia del Arte, así como el Diploma de Especialización en Estudios Japoneses. Se especializa en el Arte y la Cultura Audiovisual de la primera mitad del s. XX, y en las relaciones artísticas interculturales, especialmente entre Asia y América Latina (fue becaria del Gobierno de México), con especial interés en el Sudeste Asiático y en Oceanía.