El género del yaoi en España XI: Ediciones Tomodomo y su línea BL.

Los dos primeros años de Ediciones Tomodomo, como ya se pudo ver en el artículo anterior, sirvieron para que el Boys’ Love renaciese en España. Un ejemplo de ello sería que, con el éxito de esta editorial, Ivrea y Milky Way se lanzaron de lleno a este campo del manga.

Logo de Ediciones Tomodomo.

Las obras con contenido BL que Tomodomo trajo desde inicios del año 2016 hasta finales del 2017, es decir, en estos últimos dos años, han sido cinco, todas ellas reseñadas previamente en Ecos de Asia. La primera de ellas fue Sorano y Hara. Entre el cielo y el suelo, un spin-off de En la misma clase, que ya ha sido tratada en el artículo anterior.

Tras la maravillosa obra de Asumiko Nakamura, Tomodomo trajo ¿Quién es el 11º pasajero?, de Môto Hagio, una obra publicada en Japón en los años setenta del siglo pasado. Hay que decir de antemano que no se trata de una obra BL al uso, pero sí que se podría incorporar en esta serie de artículos debido a la relación amorosa de los dos protagonistas, pero también hay que decir que no es un shônen-ai, pues la categorización de este manga fuera del shôjo y de la ciencia ficción es bastante difícil.

La trama del manga trata sobre un grupo de diez estudiantes de diferentes planetas que aspiran a ingresar en la Universidad Estelar, pero para hacerlo deben de enfrentare a una prueba de acceso a bordo de una nave espacial a la deriva. El problema está en que cuando suben todos a la nave, en vez de ser diez pasajeros son once; por lo tanto, ¿quién es el 11º pasajero?, este es uno de los elementos principales de esta obra.

El otro factor importante es la relación que hay entre dos de los personajes a bordo. Estos son Tada y Frol, y entre ellos hay una relación amorosa bastante extraña, puesto que Frol, a pesar de tener apariencia femenina –andrógina en realidad–, no es una mujer, pues la raza a la que pertenece carece de sexo y de género definido en su juventud; de hecho, uno de sus objetivos es graduarse en la Universidad Estelar para conseguir los méritos que le permitan transformarse en hombre. De este modo, y sin desvelar que ocurre al final de la historia, no se podría definir esta relación de homosexual debido a que Tada es un hombre y Frol quiere convertirse en hombre, pero al carecer uno de ellos de sexo y de género, no se debería de catalogar como tal.

Esta edición, además, incluye una secuela de la obra original, titulada “Al horizonte del este, eternamente al oeste”. Esta trama es protagonizada por Tada y Frol, por lo que sería la continuación de esta extraña relación nacida en una nave espacial.

Pero lo más importante de este manga no es la trama, ni el dibujo –de apariencia muy clásica, ya que se ha realizado hace más de cincuenta años–, sino el hecho de que se haya traído a España una obra de Môto Hagio, una de las mangaka que más influyó en la creación del género BL, como se pudo ver en el primer artículo de esta serie. Esperemos que Tomodomo no pierda nunca esta costumbre suya de traer obras únicas e imprescindibles como puede ser ¿Quién es el 11º pasajero?.

Portada del tomo único ¿Quién es el 11º pasajero?, de Ediciones Tomodomo.

Pájaro que trina no vuela, de Kou Yoneda, también apareció en España en 2016, pero a diferencia de todo lo publicado por Tomodomo, esta obra es la única que ha traído la editorial que aún continúa actualmente en Japón (empezó a publicarse en el año 2011 en la revista HertZ de Taiyo Tosho, editorial que recopila estas historias en volúmenes).

Es posible que se trate de la obra BL de Tomodomo más oscura y “adulta” que haya traído hasta el momento, pero no “adulta” en el sentido pornográfico, sino por la profundidad emocional a la que hace falta recurrir para entender verdaderamente este manga, así como el trasfondo de los personajes.

El protagonista esencial es una banda yakuza, ya que es en ella donde se desarrolla toda la historia. Los dos personajes masculinos son Yashiro y Dômeki, y la relación entre ellos es puramente profesional, puesto que el segundo es el guardaespaldas del primero, quien es un jefe de rango secundario de la mafia. Lo que ocurre es que Yashiro, una persona sadomasoquista debido a todo lo que abusaron sexualmente de él en su niñez, adolescencia y juventud, empieza a ver en Dômeki una vía de escape, un lugar en el que refugiarse para huir de su desolador pasado. El problema es que Dômeki, un expolicía y expresidario, es heterosexual e impotente, pero esos dos factores no son suficientes para que Yashiro, de quien no hay que olvidar que llegó hasta su puesto yendo de cama en cama, consiga obtener a Dômeki, tanto emocional como físicamente.

Portada del primer tomo de Pájaro que trina no vuela, de Ediciones Tomodomo.

La edición de Tomodomo también trae varias historias adicionales, como pueden ser “Don’t stay gold” y “No caerá mientras vuele. Pero tampoco podrá cantar jamás” incluidas en el primer tomo. Todos los extras que vienen en los mangas publicados en español, están relacionados con los personajes que aparecen en Pájaro que trina no vuela, por lo que son complementos de la historia principal.

El dibujo y el estilo de este manga también destacan bastante, puesto que no es a lo que el público funsashi y fujoshi está acostumbrado. Se trata de un diseño más adulto, donde los personajes no aparecen afeminados ni idealizados, sino que son bastante reales e incluso únicos, ya que el diseño de cada personaje va incuestionablemente unido a sus emociones y forma de ser. Un manga que sale indiscutiblemente de los estándares del Boys’ Love, siendo justamente eso lo que lo hace tan único y esencial.

Portada del segundo y der tomo de Pájaro que trina no vuela, de Ediciones Tomodomo.

Ya en 2017, Tomodomo tres nuevas obras, aunque en este artículo solo se tratarán dos de ellas, pues la tercera salió al mercado este mes de diciembre. La primera fue otra secuela de En la misma clase y Sorano y Hara. Entre el cielo y el suelo, y de la que ya se ha hablado a lo largo de este artículo. Se trata de Antiguos alumnos, un manga de dos tomos que se publicó en Japón bajo el nombre de O.B. en la revista Opera, de la editorial Akane Shinsha, entre los años 2012 y 2013.

En este caso no se trata de una única historia, sino de varias, ya que Asumiko Nakamura lleva al extremo lo que se veía en sus obras anteriores, es decir, desarrolla la trama de cada uno de los personajes que habían aparecido en sus historias. A pesar de todo, se podría decir que los protagonistas son Sajô y Kusakabe de nuevo, pues el trato que da la mangaka a su historia, siendo la más larga y detallada de todas, la destaca del resto. En este caso, lo que se trata es la relación a distancia que hay entre ellos desde que Sajô se trasladase a Kioto para estudiar Farmacia en la Universidad.

Las otras historias pertenecen a la relación tan dificultosa debido a factores como la edad de Hibiki y Arisaka, el vertiginoso pasado pasional de Koma con Ryuuichi, y el estado del profesor de música Hara y su exalumno Sorano. También aparecen otros personajes destacados como Kinosaki, un nuevo compañero de Facultad de Sajô en Kioto, Miyamura y Kawanishi, también recientes amigas de Sajô; una mujer, cuyo nombre no se dice por ningún lado del manga, que se acostaba con Koma y Ryuuichi –y a la que se le dedica un especial de pocas páginas junto a Koma titulado “Charla entre chicas”–, o la hija que Arisaka tuvo con su exmujer y que se va a casar.

Con todo esto, Antiguos alumnos es un compendio de diferentes historias que forman parte de un único mundo creado por Asumiko Nakamura. Tras leer En la misma clase y Sorano y Hara. Entre el cielo y el suelo, este manga es muy recomendable, e incluso sería posible que Tomodomo trajese más secuelas de esta serie, pues en Japón existen algunas más que aún no han sido traducidas al castellano.

Portada de los dos tomos de Antiguos alumnos, de Ediciones Tomodomo.

Junto con Antiguos alumnos, fue el tomo único de Mother’s Spirit, realizado por Enzo para la editorial Tokuma Shoten, el otro BL en salir al mercado, siendo, en este caso, una de las novedades de Tomodomo en el XXIII Salón del Manga de Barcelona.

Lo más extraño con respecto a esta publicación es el hecho de que Enzo no es nada conocido en España, pues es la primera obra que se trae de esta mangaka. Aun así, y ya que ha continuado la historia en la revista Chara Selection, de la misma editorial, bajo el nombre de Mother’s Spirit 2, es posible que no sea lo único que se vea de ella en España, puesto que Tomodomo ya ha dicho que tiene planeado traer la continuación cuando Tokuma Shoten la recopile en uno o varios tomos.

Aquí se presenta a Ryôichirô Tsutsuzuki, un funcionario de la Universidad de Kôjô al que se le encomienda la tarea de ser el guía y asistente de Qaltaqa, el jefe de la tribu de los Lutah que viaja a Japón para aprender de la civilización nipona para poder modernizar a su pueblo cuando regrese. El problema aquí radica en los problemas de lenguajes y de cultura, pues el choque que se produce entre ambos es lo que acamaba desembocando a la relación amorosa entre los protagonistas. Por ejemplo, en la tribu Lutah todas las personas duermen juntas y semidesnudas en la misma habitación, lo que hace que duerma en la misma cama que Tsutsuzuki, al menos al principio. Este choque de culturas, además, va acompañado de la conservación de las tradiciones, algo que se refleja en Aqnam, hermano de Qaltaqa, y la necesidad de modernizar las cosas para que la tribu Lutah pueda sobrevivir, estando esta última idea encarnada en el propio Qaltaqa.

La decisión de Tomodomo de traer esta historia, la cual se sale un poco de su línea editorial más dulce y romántica, fue todo un acierto, pues junto con Pájaro que trina no vuela se contenta a un público más adulto. Además, la gran calidad del dibujo y la maravillosa manera de llevar la trama, son dos de las razones por las que este manga es imprescindible para cualquier amante del Boys’ Love.

Portada de Mother’s Spirit, de Ediciones Tomodomo.

También en el XXIII Salón del Manga de Barcelona se anunció un nuevo BL para el 2018: Jackass!, de Scarlet Beriko;[1] tiene como objetivo aparecer en el mercado en enero del próximo 2018. Esta obra, publicada en japonés en la editorial Shinshokan, trata sobre “un estudiante pobretón que no puede permitirse ni unas zapatillas nuevas cae en las redes de un pijo… con un fetiche por las pantimedias”.[2]

Portada del tomo único Jackass!, de Shinshokan.

Así concluye la participación de Ediciones Tomodomo en el género Boys’ Love hasta el momento, pero está claro que tiene mucho que ofrecer todavía. Junto con ella, la otra editorial que sorprendió mucho a los lectores habituales fue Milky Way Ediciones, cuya irrupción en el mercado fue en el año 2013. La razón de la sorpresa es el hecho de que, junto a Tomodomo, publica obras diferentes a lo que se estaba acostumbrado, y, claramente, uno de los elementos clave del actual planning de la editorial asturiana es el BL, siendo esa la razón principal por la que se hablará de ella en el próximo artículo.

Notas:

[1] También se anunció Sombras sobre Shimanami en dicho salón, pero dicho manga no se puede considerar una obra Boys’ Love, sino que pertenece al género LGTB+, siendo esa la razón por la que no se ha incluido en este artículo. De todos modos, la reseña de esta obra ya ha sido publicada en Ecos de Asia.

[2] Página web de Ediciones Tomodomo, disponible aquí.

Daniel Rodríguez (208 Posts)

Profesor de Geografía e Historia. Graduado en Historia del Arte en la Universidad de Oviedo, con un Máster Universitario en Estudios en Asia Oriental cursado en la Universidad de Salamanca y otro Máster Universitario en Formación del Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato y Formación Profesional en la Universidad de Oviedo. Ha trabajado para el Museo Arqueológico de Asturias, la sala de exposiciones LAUDEO, la Universidad de Salamana, Satori Ediciones y la Academia Formación Sagan.